Noticias / Neurosexismo, salud cerebral y otros desafíos
NOTICIAS INSTITUCIONALES
Neurosexismo, salud cerebral y otros desafíos
Nos visitó la Dra. Silvia Kochen, del ENyS Conicet UNAJ y explicó los temas que abordó la Semana del Cerebro. ¿Por qué es necesario cuidarlo y cuán importante es tomar dimensión desde el minuto 0?
Yo creo que el tema del cuidado es un tema súper importante, mucho más para nosotras las mujeres. Creo que una forma de cuidarnos -y hablando de la salud del cerebro- es siendo solidaria, amando, teniendo amigas, teniendo amigos, teniendo hijos y haciendo una actividad que uno sienta que se siente bien y que la hace sentir bien, que pueda ser creativa. También teniendo un salario digno, teniendo una vivienda, una alimentación. O sea, todas estas cosas que parecen que son ajenas a la salud del cerebro, en realidad tienen que ver con la salud cerebro, es poco probable que uno pueda estar bien y que pueda tener un cerebro saludable en cualquier etapa de la vida, desde un recién nacido hasta la persona ya en edad vieja.
¿Qué está diciendo la ciencia?
Hay hechos en modelos experimentales y nosotros tenemos estudios en investigación clínica, que tiene que quien puede garantizar buenas condiciones de vida, una buena calidad de vida, tiene un cerebro más saludable que alguien que no tiene garantizadas esas condiciones.
¿Tiene que ver en la tranquilidad de vivir, de pasar la vida y de pensar en placeres más que en preocupaciones?
Tiene que ver con eso en cuanto a decir una situación de bienestar, pero el bienestar como define la Organización Mundial de la Salud es interesante porque en los últimos tiempos cambia el concepto de salud y habla de una situación de bienestar, justamente. Es muy amplio ese concepto, entonces si un bebé recién nacido -en su primer año de vida- no está bien alimentado, no tiene buenos nutrientes, ese cerebro va a tener déficit importante.
¿Qué has estudiado vos?
Mi tema especial es en epilepsia y estamos trabajando en envejecimiento saludable y en demencia, pero hay un tema que nosotros hicimos un ciclo que ya vamos por el segundo ciclo de charla “Severa y mujer” le pusimos. Tiene que ver porque en este siglo en realidad aparece un tema que se le da el nombre en el mundo de neurosexismo, que en el fondo (en el siglo pasado) se decía que como el cerebro de las mujeres pesaba menos, éramos un poquito más tontitas, no teníamos aptitudes para las matemáticas, para las ciencias y no se tenía en cuenta un detalle que era la proporción del peso del cerebro y el peso corporal. Si se tomaba eso, es un fraude científico. En este siglo se utiliza un recurso que es hermosísimo, valiosísimo, que nosotras y nosotros hemos investigación con eso que es la resonancia magnética del cerebro y se utiliza ese recurso que es social. Exploro el cerebro sin invadirlo, sin agredirlo, sin nada y lo puedo hacer en forma funcional. Y se comenzó a utilizar para hacer fraudes científicos y con estudios que usa el lenguaje científico porque no son científicos, porque no respetan el método científico, empiezan a decir que nosotras las mujeres -por ejemplo- no somos buenas para determinadas tareas o no servimos para tantas otras, o que tengamos que decidir por ejemplo por un trabajo que es nefasto, juicio sobre una decisión nos basamos en los afectos en las emociones, en las emociones. Y si vos tenés que elegir alguien para trabajar, debe ser alguien que se base en una cosa de que sea razonable, objetivable, no en las emociones y todo esto son trabajos que son fraudes científicos. Hay un ciclo que yo digo “no virtuoso”, salen estos trabajos y tenemos que salir toda las mujeres y hombres que hacen neurociencia en serio a decir esto es “falso” porque la primera reacción es “Ah, ahora entiendo”. Entonces tenemos que decir eso es falso, demostrar porque es falso y ahí otra vez vuelve el ciclo.